ESPÍRITU
AZUL
Suplemento
informativo de la página de Internet del Grupo VII de Scouts de
México
Mayo de 2001
Año 2 No.16
En
nuestro libro de visitas hemos recibido de España, Argentina, Portugal, Líbano,
Ecuador e Italia. Más de la mitad de las personas que han firmado nuestro libro
son ajenas al grupo. Es bueno recibir comentarios de gente alrededor del mundo,
pero esperamos sobre todo encomtrar saludos o mensajes de nuestra gente, ya sea
para nosotros o para alguien más. ¡No dejes de hacerlo! Esperamos también tus
anécdotas o colaboraciones para este boletín.
Escríbenos
a:
Espirituazul@GRUPOVII.com
Los
dedos de las manos pierden sensibilidad y fuerza de agarre, los labios están
imposibilitados para articular con normalidad, las mejillas arden, los pies
duelen y en general el cuerpo no responde.
No hay salida, no hay madera y no existe refugio alguno, piedras, nieve
y cielo. El corazón late y vive. Se siente vivo...
Este
mes tenemos 12 fotografías nuevas en nuestras Galerías de Mayo.
Cronograma. Del
15 al 19 de abril de 1946 se llevó a acabo el Campamento
Nacional...
Libro de visitas.
Date
una vuelta y escríbenos un comentario.
Campamento de tropa al Nevado de Toluca. 8 de
febrero de 1987. Parados sobre la congelada laguna del Sol, Pablo Álvarez
Tostado y Luis Daniel Lagos.
El Consejo Directivo
de “Espíritu Azul” desea agradecer a los siguientes scouts del Grupo
VII la entusiasta aportación, y en algunos casos hasta donación de las imágenes
que conforman nuestra incomparable galería de fotografías. Gracias a ustedes enriquecemos nuestro
acervo de imágenes, el cual esperamos seguir incrementando con la misma regularidad.
www.frenchopen.org
Abierto de
Francia (tenis)
http://tiempo.weather.com/
Información meteorológica
http://www.fourmilab.ch/earthview/expert.html
Para ver la tierra y la luna
El Grupo VII siempre ha sido pionero
e innovador de actividades al aire libre.
Generación tras generación el ingenio y espíritu de aventura han sumado
un cúmulo de actividades que se adoptan y enriquecen con nuevas ideas. Esta es
una tradición que no se debe perder.
Los
dedos de las manos pierden sensibilidad y fuerza de agarre, los labios están
imposibilitados para articular con normalidad, las mejillas arden, los pies
duelen y en general el cuerpo no responde.
No hay salida, no hay madera y no existe refugio alguno, piedras, nieve y
cielo. El corazón late y vive. Se siente vivo porque todo a su
alrededor parece muerto, hasta el oxígeno que llega a los pulmones invade el
interior del cuerpo con ese gélido mundo.
No hay madera, no hay calor.
En
el mes de febrero de 1987 se llevó a cabo un campamento que con los años se ha
convertido en una experiencia anual de rutina para la Tropa Roland
Philipps. La búsqueda de la
nieve. En aquella primera
experiencia no sabíamos lo que nos esperaba, en nuestra mente sólo estaba fija
la idea de acampar, por lo menos dos noches a temperaturas extremas. Objetivo, el cráter del Nevado de
Toluca.
Viernes
por la noche. A nuestro arribo al
borde de la enorme boca del volcán la nieve nos esperaba, solos en un mundo
blanco que a la luz de la luna reflejaba un espectáculo digno de comparación con
cualquier paisaje arriba del círculo polar ártico. Descendimos y plantamos el
campamento. La noche fue fría como
ninguna otra y aunque íbamos preparados no contábamos con la intensidad del
gélido viento que durante la noche terminó por romper una de las tiendas. Pareciera ya pasados los años que todo
esto fue un sueño. La incontenible
fuerza de la naturaleza transformada en viento y frío azotó toda la noche y
madrugada. El sonoro ulular y el
incesante golpeteo de las tiendas apenas nos dejó dormir. Si alguien tuvo la necesidad de salir a
media noche como es costumbre en campamentos, en esta ocasión nadie lo
hizo. Fuimos conscientes de la
gravedad de la situación hasta la mañana siguiente: -¡La laguna!- ¿Qué había con la laguna? Era de esperarse, la laguna estaba
completamente congelada. Quieta,
silenciosa y transparente. Para que
una cantidad tan vasta de agua se congele no puede más que asumirse que pasamos
una noche a no menos de –10 °C.
Podían verse las piedras en el fondo y aquellas que rebasaban el nivel
del agua habían quedado atrapadas en el hielo. Nos paramos en la nueva, efímera y
azulada superficie y apreciamos en su total magnitud un capricho de la
naturaleza, de esos que muy pocas veces en la vida se tiene la oportunidad de
ver en estas latitudes.
Tratamos
de romper ese capricho lanzando piedras sobre el hielo y no hubo peso alguno que
pudiera lograrlo. Una parte de la
laguna quedó tapizada de rocas incrustadas en el hielo que no pudieron atravesar
la gruesa capa formada durante la noche.
El frío y el viento continuaron y dado que estuvimos imposibilitados para
tomar nuestro baño matinal decidimos jugar la tradicional guerra de bolas de
nieve, a la cual se integró toda la tropa que poco a poco fue abandonando el
juego debido al congelamiento de las manos. Muchos recordarán la tarea de
rehabilitación y los consejos expertos para detener el fuerte ardor y
entumecimiento de los huesos. Aún
congelados jugamos llave y los golpes contra las piedras y choques de rodilla
dolieron más que nunca. No
conformes los guías de patrulla realizaron una excursión a Pico del Fraile, una
excursión dentro del campamento.
Sobra decir que el viento y el frío les hicieron grata
compañía.
A
su regreso volvimos a experimentar una nueva sensación. A eso de las seis de la tarde el cielo
nos encerró en el cráter, las voces no hacían eco y parecía que las tonalidades
rojizas que nos absorbían bajaban cada vez más. No fue una aurora boreal, por obvias
razones, sin embargo, poco faltó para verla y escucharla tal y como sucede en el
norte de Canadá. Un extraño
sentimiento de aislamiento y soledad nos invadió y congelados permanecimos
observando nuestro alrededor, no se podía hacer otra cosa más que apreciar el
segundo capricho de la naturaleza al que habíamos sido
invitados.
Esa
noche y a la mañana siguiente hubo dos ceremonias. Ceremonias inolvidables de dos lobatos
del VII que formalmente fueron aceptados dentro las huestes de Roland Philipps y
sus expedicionarios. Será difícil
olvidar el llamado del Jefe de Tropa en la lejanía, correr sobre la nieve y
esperar la llegada de todos.
Uniformados, el investido al frente se deshace de su suéter y camisa
blanca que sustituye por una camisola que sale de entre la nieve. Una pañoleta azul al
cuello.
¡Tropa! ¡Por el honor
Scout!
¡Arriba
el Siete!
Es
difícil precisar cuando nevará, sin embargo desde ese entonces entre los meses
de enero y marzo los scouts de la Tropa Roland Philipps tienen el equipo
preparado, para en cualquier momento salir en búsqueda de la
nieve.
Artículo
escrito en abril de 2001.
Iván
Guerra Villasana R.S.
El Consejo
Directivo de “Espíritu Azul” desea agradecer a los siguientes scouts del Grupo
VII la entusiasta aportación, y en algunos casos hasta donación de las imágenes
que conforman nuestra incomparable galería de fotografías. Gracias a ustedes enriquecemos nuestro
acervo de imágenes, el cual esperamos seguir incrementando con la misma
regularidad.
Gracias
a:
Josafat Aguilar
González
Ricardo Olagaray Sobrado
Jorge Luis
Álvarez-Tostado Aguirre
Juan Roberto Pitman Romero
Pablo
Álvarez-Tostado Delgado
Armando Rincón Gutiérrez
Raúl Delgado
Aranda
Rafael Rosas Escobedo
Carlos García
de León Moreno
Gerardo Magaña Silva
Gustavo
González D’asseo
Omar Medina Fragoso
Iván Guerra
Villasana
Mario Nieves Trejo
Gerardo
Gutiérrez Nava
Plutarco Santiago Baños
Gabriel
Gutiérrez Olvera
Miguel del Villar Barragán
Eduardo Llamosa
Neumann
René Villaseñor Magaña
Germán Olagaray
Palacios
Roberto Villaseñor Magaña †
Juan Daniel
Olagaray Sobrado
Todos aquellos
que deseen integrar sus fotografías en este “su sitio” no tienen más que
contactarnos a: espirituazul@GRUPOVII.com Nosotros pasamos por las imágenes, las
digitalizamos y devolvemos “con
oportunidad”. Si tienes la
facilidad de escanear las fotografías no resta más hacer el envío vía correo
electrónico a la dirección antes mencionada. ¡Las imágenes que aún no están en la
página son las que estamos esperando que envíes! ¡Dependemos de la participación de
todos!
Aprovechamos la
oportunidad para disculparnos debido a que la información de algunas fotografías
en la galería de “Prehistoria” no ha sido actualizada, así como la completa
mudanza de las imágenes en la galería de “Tiempos Modernos”. Rogamos su comprensión y paciencia. La mudanza de la página a: www.GRUPOVII.com ha sido una labor titánica
que esperamos culminar lo antes posible.
Los mantendremos al tanto de los cambios y actualizaciones. Tiempo y manos expertas en esta área nos
hacen falta, pero el compromiso se renueva continuamente para proporcionar a
todos ustedes una página digna de nuestro siempre querido Grupo
VII.
Atentamente
Consejo
Directivo de Espíritu Azul
¡Por el Honor
Scout!
¡Arriba el
Siete!