Suplemento
Informativo de la página de Internet del Grupo VII de Scouts de
México
Enero 2003
Año 4 No. 31
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no puedes ver las imágenes de este boletín has clic AQUÍ.
Editorial
Después
de un año de intenso trabajo en diversos proyectos de nuestra,
-tú- página de Internet y en otros más no
virtuales, retomamos el ritmo acostumbrado para que no te falten
nuestro boletín, fotos, artículos y sorpresas. Esperamos que este 2003 sea
un gran año para el grupo y que con entusiasmo salga avante en todos
los aspectos. Nuestra
más sincera felicitación al escudero Eric Reyes, quien el pasado 12 de
enero recibió el cordón de Jefe de la Tropa. Asimismo, un
agradecimiento a Gustavo González D'Asseo por haber ayudado al grupo
cuando más lo necesitaba. Sabemos que sus múltiples ocupaciones no le
permitieron trabajar con la fuerza y espíritu de su primera gestión, pero éste
fue un tiempo fundamental para que Eric se
involucrara en todo lo relacionado con los muchachos y sus
necesidades.
Homenaje a César Macazaga
Ordoño
61 años después de que su guía
de patrulla, Guillermo Pérez Olagaray le encargara adiestrar en las pruebas de
3ª Clase a los nuevos miembros de su patrulla -Búhos- y como consecuencia
se abocara a escribir lo que sería el Manual Scout, el pasado 28 de septiembre,
César Macazaga Ordoño recibió del Grupo VII, en un evento organizado por
Espíritu Azul, un merecido homenaje.
El Discurso pronunciado por César Macazaga durante el homenaje está disponible ya en nuestra página de Recuerdos de fogata. Para leerlo haz clic aquí.
Cronograma. 1955,
El 3 de abril, y originalmente
como una de las actividades concebidas para conmemorar el XX Aniversario de la
fundación del Grupo VII, el clan Hernán Cortés organiza el
primer...
Homenaje
a César Macazaga Ordoño. 28 de septiembre de 2002.
Pablo Álvarez-Tostado
durante los arreglos previos en el Centro Universitario México –
CUM
Galerías
del
mes. Agregamos 18 nuevas fotografías a nuestro álbum
cibernético.
www.rehabilitacionyterapiafisica.com
Clínica de terapia física
www.asterix.tm.fr
Asterix, el galo
61
años después de que su guía de patrulla, Guillermo Pérez Olagaray, le encargara
adiestrar en las pruebas de 3ª Clase a los nuevos miembros de la patrulla Búhos,
y como consecuencia se abocara a escribir lo que sería el Manual Scout, el
pasado 28 de septiembre, César Macazaga recibió del Grupo VII, en un evento
organizado por Espíritu Azul, un merecido homenaje.
Es difícil
poner en perspectiva el trabajo literario de César y su aporte al escultismo
continental, y la razón no es otra sino que en las últimas 3 décadas los cambios
introducidos para “perfeccionar” la filosofía y método del escultismo han venido
a crear este ente que nadie alcanza a definir: ¿somos un club social? ¿seremos
quizá sólo una actividad extra escolar? ¿el pentatlón? o ¿somos exploradores y
estamos buscando flores?
La cita
ocurrió en el auditorio del Centro Universitario México (CUM), a los veinte
minutos después de las siete de la tarde, César entró por las puertas del
auditorio para encontrarse con las reminiscencias del fruto de su
trabajo.
En el
presidium se encontró representado el escultismo mexicano con todas sus
contradicciones: Raúl Sánchez Vaca, Jefe Scout Nacional; Carlos Galán Soni, Jefe
de Adiestramiento de la Asociación Tradicional y quien realmente funge como Jefe
Nacional; Arturo Reyes Fragoso, escritor del libro De como Macazaga llegó a ser nombre de
manual; y por supuesto el R.S. Iván Guerra Villasana, Jefe del Grupo
VII y representante de Espíritu Azul.
El
discurso de César se nos antojó demasiado corto, después de años de leer y
releer el Manual Scout, ese día teníamos la oportunidad de conocer a su autor.
No obstante la brevedad, el discurso versó sobre los grandes temas de la agenda
scout nacional, a saber: la Ley Scout, jefes y dirigentes, y los lineamientos
generales para formar buenos ciudadanos.
Desde un
inicio sus palabras hicieron pensar a más de uno no sólo por ser directas sino
también por su acierto:
“Nuestra
arrogante frase de antaño: “vida en el campo al aire libre,” ha tomado asiento
generalizado en muchísimas personas, que van a acampar con equipos comerciales
cuyo uso no requiere casi en nada de la destreza y del aprovechamiento natural
de los elementos propios y sugerentes que nos brinda el campo. Fundamentalmente, la práctica de sus
acampadas tienen validez en la convivencia, el recreo y la diversión, pero no
conllevan la autoformación: la propia formación del
carácter”.
La realidad
actual del movimiento scout en nuestro país obligó a César a abordar el delicado
tema de la Ley Scout, al respecto sus palabras fueron contundentes: “No es scout
quien no cumple con su promesa, no es un scout aquel que no acepta libremente
como norma de su vida los ideales contenidos en la Promesa y la Ley
Scout”.
Y también no
se podía dejar de lado a los dirigentes: “Consejeros nacionales y ejecutivos
torpes han entrado de fijo en una maratón de presiones, trampas y astucias que
muchas veces terminan con el triunfo del desconcierto y de la desilusión. El escultismo pierde el ser cuando la
corte de honor sigue imperando como un tribunal de castigos y no como un
instrumento de formación en buena ciudadanía, al continuar expulsando
banalidades.”
Bien, nuestro
Jefe de Grupo cerró el tema, en su turno al micrófono, al decir: “el verdadero
escultismo se vive con las rodillas ventiladas”.
El homenaje
no sólo significó el rencuentro de César con el Movimiento nacional sino también
con su larga ausencia del grupo que lo vio nacer. Para aquellos que de una forma
u otra estuvimos inmersos en la preparación de este homenaje y para aquellos que
han estado atentos a la forzada evolución de la Asociación Scouts de México en
las últimas décadas, quizá esperábamos ver el encuentro final entre el presente
y el pasado, o quizá queríamos ver el encuentro entre lo bueno y lo malo, entre
el pasado y el oscuro e incierto futuro.
Lograr
cristalizar los objetivos y metas intrínsecas a la naturaleza del escultismo,
parafraseando a nuestro autor, solo son alcanzables en la misma magnitud de la
correspondencia del muchacho para con su jefe. La formación no tendrá lugar entre la
apatía del muchacho y la estulticia de su jefe, es decir, la cadena es tan
fuerte como uno de sus eslabones.
“Si el
escultismo ya no vislumbra tiempos de expansión, por causas ajenas a su
naturalidad, debemos acrecentar su nobleza y genio, para hacerlo de
calidad y que pueda gozar de la estimación
general.”
Firma Búho
Nival, según Búho Veloz: “Gran Búho”, por sangre animal nos unen
lazos.